Es posible que ya formes parte de las más de 95 millones de personas en Estados Unidos que han recibido al menos una dosis de una vacuna contra el COVID-19. Quizás estés todavía esperando tu turno. Sea cual sea el caso, existe una pregunta crucial en la mayoría de nuestras mentes: ¿Cuánto tiempo nos protegerán realmente las vacunas?
Al igual que la mayoría de los aspectos del virus, la respuesta no es del todo clara. ¿Por qué? Porque aunque hemos estado luchando contra la pandemia por más de un año, las vacunas recibieron autorización de uso de emergencia hace relativamente poco tiempo. Por lo tanto, los expertos no han tenido tiempo para estudiar su efectividad a largo plazo.
Sin embargo, esa investigación ya está en marcha, y mientras tanto, los expertos afirman que podemos hacer suposiciones con fundamentos.
¿Cuánto tiempo durará la inmunidad de la vacuna?
Las autoridades sanitarias federales no han proporcionado una respuesta definitiva a esta pregunta.
Advertisement
Pero basándose en los ensayos clínicos, especialistas saben que la protección de las vacunas debería durar un mínimo de tres meses. Eso no significa que la inmunidad protectora vaya a caducar después de 90 días; ese fue simplemente el período de tiempo en el que se estudiaron a los participantes en las pruebas iniciales de Pfizer, Moderna y Johnson & Johnson. Se espera que esa vida útil aumente a medida que los investigadores continúen estudiando las vacunas.
En el mundo real la protección debería durar un poco más, aunque ese período de tiempo aún debe determinarse con más estudios, dijeron especialistas.
También existen ciertos factores que pueden influir en la cantidad y duración de su protección.
Chunhuei Chi, director del Centro de Salud Global de la Universidad Estatal de Oregon, dijo que las respuestas inmunitarias varían en cada caso. Las personas que tienen una respuesta inmunitaria más fuerte a una vacuna producirán más anticuerpos y linfocitos de memoria, y por lo tanto tendrán una inmunidad más fuerte, afirmó. Sin embargo, no existe evidencia actualmente que demuestre que una respuesta inmunitaria más fuerte aumente la duración de la inmunidad.
Advertisement
Y tampoco significa que las personas con una respuesta inmunitaria más fuerte experimentarán efectos secundarios más graves por las inyecciones o viceversa, según un estudio reciente del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido.
La inmunidad también podría depender de lo que suceda con las futuras variantes. Por ejemplo, si una persona estuviera expuesta a una variante capaz de evadir anticuerpos inducidos por la vacuna, la inyección podría no ser tan efectiva como se esperaba inicialmente, dijo Lana Dbeibo, experta en enfermedades infecciosas de la Facultad de Medicina de la Universidad de Indiana.
Aunque los equipos de investigación no tienen aún todas las respuestas, el conocimiento previo de otros coronavirus, así como la investigación emergente sobre la cepa actual, pueden proporcionar pistas.
Advertisement
Al observar los estudios sobre la inmunidad natural del coronavirus, las y los expertos plantean la hipótesis de que la inmunidad protectora de las vacunas durará al menos de seis a ocho meses. Y si la inmunidad del SARS-CoV-2 termina siendo similar a la de otros coronavirus estacionales, como los “resfriados comunes”, es hasta posible que las vacunas puedan brindar protección hasta uno o dos años antes de necesitar un refuerzo, dijeron especialistas.
¿Podemos extrapolar de lo que sabemos sobre la inmunidad natural?
De hecho, gran parte de esta hipótesis proviene de la extrapolación de datos que examinaron las respuestas inmunitarias de personas que han tenido COVID-19 y enfermedades por otros coronavirus, en lugar de personas que han sido vacunadas, dijo Dbeibo, quien es directora de iniciativas para vacunas de la Universidad de Indiana.
Advertisement
“Pero las respuestas a las vacunas no deberían ser menos confiables que en la infección natural”, agregó.
La investigación actual muestra que las personas que han sido infectadas con COVID-19, la enfermedad causada por el coronavirus, mantuvieron una inmunidad sólida después de ocho meses. Eso les da a los investigadores un punto de partida para predecir cuánto tiempo podría durar la inmunidad tras la vacunación, explicó Dbeibo.
Sin embargo, las investigaciones también muestran que las personas que tuvieron casos más graves desarrollaron una reacción inmunitaria más fuerte que aquellas con formas más leves de la enfermedad. Y debido a que la inmunidad inducida por la vacuna parece ser más parecida a la inmunidad natural derivada de las infecciones graves de COVID-19, los investigadores creen que las personas que reciban una vacuna contra el coronavirus estarán mejor protegidas que la mayoría de las personas con inmunidad natural, dijo David Topham, profesor de microbiología e inmunología de la Universidad de Rochester.
Advertisement
Dicho todo esto, los anticuerpos disminuirán. Y aunque es un proceso gradual, una vez que los anticuerpos disminuyan a un nivel que ya no procure protección, la reinfección será posible. Aún así, lo más probable es que esa nueva infección sea más leve, dijeron especialistas.
Topham, director fundador del Instituto de Inmunología Traslacional y Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Rochester, ha estado estudiando el coronavirus y el papel de las células B de memoria, células inmunitarias que existen durante toda la vida y que producen anticuerpos cuando vuelven a ser expuestas a un patógeno al que han sido programadas para atacar. Topham afirmó que algunas personas que habían sido hospitalizadas con infecciones graves de COVID-19 todavía tenían altas frecuencias de células B de memoria así como de anticuerpos, hasta nueve meses después de la infección.
Topham dijo que las células B de memoria pueden incluso adaptarse rápidamente a una nueva variante, por lo general en cuestión de días.
Advertisement
“Incluso si los niveles de anticuerpos disminuyen y te vuelves a infectar o te infectas con una variante, las células B de memoria —si tienes suficientes— responderán muy rápidamente y evitarán esa enfermedad grave”, dijo.
Los expertos también están especulando sobre si la inmunidad al SARS-CoV-2 será tan duradera como la de los coronavirus estacionales, que las personas contraen repetidas veces a lo largo de sus vidas. Los expertos estiman que la inmunidad contra esos coronavirus dura un par de años, y algunos expertos predicen que, con el tiempo, ese podría ser el caso del virus actual.
“Creo que este coronavirus terminará siendo como otros coronavirus estacionales en el sentido de que serás infectado o vacunado de niño, tendrás una enfermedad leve y luego, cuando lo veas ya de adulto, tendrás algo de inmunidad. Si bien no te protegerá de la infección, lo peor que podrás contraer será un resfriado fuerte”, dijo Topham.
Advertisement
Topham aseguró que el COVID-19 es grave en la actualidad porque “los adultos están topándose con este virus por primera vez en su vida y no tienen inmunidad preexistente”.
¿Y ahora qué?
Los equipos de especialistas todavía están tratando de determinar cuánto tiempo tardarán los anticuerpos en disminuir hasta el punto en que ya no brinden protección. Pero una vez que eso suceda, las personas necesitarán refuerzos para recordarle a sus sistemas inmunitarios que produzcan más anticuerpos contra la enfermedad, dijeron los expertos.
Chi, de la Universidad Estatal de Oregon, dijo que Pfizer, Moderna y otros están realizando ensayos clínicos para determinar cuánto tiempo extendería la inmunidad protectora una vacuna de refuerzo y también para determinar si sus vacunas pueden adaptarse para combatir las nuevas variantes del virus. Por su parte, Johnson & Johnson está probando una versión de dos dosis de su vacuna.
Advertisement
Hasta ahora, la evidencia sugiere que las vacunas disponibles siguen siendo efectivas contra la mayoría de las variantes, pero eso podría cambiar si el virus continúa mutando, dijo Chi, quien explicó que cuanto más prevalente sea el virus y más tiempo tome vacunar a las personas para prevenirlo, mayor será el riesgo de que se desarrollen mutaciones que logren que las vacunas sean menos efectivas. Por eso, dijo, es urgente “vacunar a la mayor cantidad de personas lo más rápido posible”.
“Estamos en una carrera contra el tiempo”, afirmó Chi.
Leer más:
La OMS debe reiniciar la investigación sobre los orígenes del COVID-19
Los vacunados necesitan saber qué pueden hacer de forma segura
La pandemia no terminará hasta que controlemos las cepas de COVID-19 en todas partes
Hay que replantear la propiedad intelectual en situación de pandemia
Todos deberíamos usar cubrebocas N95 en este momento
Más allá de la mortalidad del COVID-19: veamos a quienes sobreviven pero no se recuperan del todo
ncG1vNJzZmivp6x7uK3SoaCnn6Sku7G70q1lnKedZLK0e8uinZ6rpK65pnuRaWlqZ2BpfHF9jpysmqakpHqlwdGaZKKmnaq7qrDAnWSvmZOqu6K%2FjJymr6GUYn56ec%2BfoLOdomKutMDRmrGeppWgrm6%2FyKemr5mTZA%3D%3D